El nuevo libro ha sido un fracaso
La semana pasada hablaba sobre el paso del tiempo y celebraba el primer año de esta newsletter. Si no hubiese sido impaciente el libro A golpe de timbre debería haber salido en este mes de marzo y no en enero como realmente fue.
A todas luces la publicación ha sido un fracaso. También hay que hablar de los fracasos, Raúl Hernández lo hizo hace poco en su newsletter. Leyéndole me he animado a hablar de este, mi fracaso.
En estos dos meses de andadura han comprado el libro solo doce personas. No esperaba un best seller, obviamente, pero sí pensé que podría llegar a tener más recorrido. Seguramente el hecho de que mucha gente ya hubiese leído los artículos por aquí, hacía que despertase poco interés. Pensé que tener la posibilidad de recopilar las reflexiones semanales en papel y kindle atraería.
Parece que no ha sido así.
¿Ha sido un error publicar el libro? No. He sacado alguna conclusión.
La primera es que la paciencia es una virtud que debo trabajar. Empecé las gestiones para publicar en Amazon pensando que me llevaría semanas; para nada. Fueron días. Debí pedir una prueba de impresión antes de promocionar el libro. No lo hice. Directamente me puse a mandar correos, whatsapps y publicar en redes sociales el enlace para adquirirlo. Pedí diez copias a coste de impresión (solo el autor puede pedirlas) y cuando me llegó el pedido descubrí que la letra era más pequeña de lo que yo había enviado y los márgenes no eran correctos. Mi amigo Chus me dice que son cosas mías que el libro está perfecto, no lo veo así.
Cuando autopublicas, haces eso auto-publicas, lo haces tú todo. Los dos libros que publiqué con anterioridad: Aprende y disfruta y Adiós a los treinta fueron publicados por dos editoriales que se encargaron de la corrección (en el segundo dejó mucho que desear), también hacen la maquetación y el diseño de la portada. En KDP (Amazon) lo haces tú todo. Claro, puedes fallar en algo cuando eres novato maquetando. Fallé, aunque aún no sé donde me equivoqué para que los márgenes no fuesen los correctos.
La segunda conclusión es que la promoción es la parte más importante para llegar a más gente, pero cansa y mucho. Isaac Belmar, al que leo desde hace un tiempo, del cual recomiendo su libro Escribir bien: o cómo fracasar mejor en el arte de la escritura, escribió en su blog que da igual que tengas 500 o 1000 seguidores y pienses que con solo un 10% ya sacas adelante el libro, no funciona así, vas a tener que ser un pesado de la leche, con familia y amigos de toda la vida principalmente, si quieres conseguirlo.
Sinceramente creo que, a determinadas personas, les tiene que resultar muy pesado recibir un nuevo mensaje sobre otro nuevo libro a través del envío masivo en una lista impersonal de difusión de whatsapp. Me imagino a fulanito pensando ya está este enviando un mensaje de que ha publicado un libro cuando lleva meses sin escribirme nada.
No gano dinero escribiendo, puse el precio del libro A golpe de timbre a 8 €. Creo que es un precio razonable ¿Sabes cuánto gané con mi primer libro? Nada. Lo doné todo a dos asociaciones (Ulertuz y Autismo Sevilla) ¿Sabes cuánto voy a ganar con el segundo que se publicó en 2021 y la editorial aún no me ha liquidado? Creo recordar que unos 170 €, que invertiré (espero cobrarlo en abril) en una cena con mi mujer.
Hace poco el mismo Isaac Belmar publicó un artículo en el que daba 10 consejos de escritura el primero tiene mucho que ver con todo esto que te cuento hoy: nunca te preocupes por las posibilidades comerciales de un proyecto. En ello estoy.
Cuando soy pesado con mi libro es para poder llegar a más gente, para que me lean, no para comprarme una segunda residencia en la costa gaditana. Volvemos al inicio y a la raíz del “fracaso”: el libro A golpe de timbre ya estaba leído antes de publicarse.
Gracias por leerme ;)
Buenas semana,
Gorka "llorón" Fernández Mínguez