Seres resilientes
Una de las actividades que he planteado este mes en mis centros de Secundaria es una charla sobre resiliencia, creo que es importante que tengan claro el concepto en estos tiempos en los que ser resiliente es tan necesario. Empecé hablándoles de Juan de Zubileta y la primera vuelta al mundo. Alguno me dijo que parecía una clase de Geografía e Historia. Razón no le faltaba, con la excusa de hablar sobre el tema que me centraba demasiado en los aspectos que rodeaban a la primera vuelta el mundo y no tanto sobre el ser resiliente que fue el marino. Tras comprobar cierto hastío en la audiencia decidí cambiar de estrategia, descartaba hablarles solo de Juan de Zubileta sino que diseñé una charla, para los grupos que me quedaban, en la que hacía referencia a cuatro modelos, centrándome en las características que tiene una persona resiliente. Las cuatro personas fueron: Edurne Pasaban (ya te he hablado con anterioridad sobre ella) que consiguió subir las catorce cimas del mundo pasando por la depresión; Viktor Frankl prisionero de varios campos de concentración y que en su libro El hombre en busca de sentido escribió que si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento; Simone Biles que fue una niña adoptada, sufrió abusos sexuales por parte de su entrenador y es hoy por hoy la gimnasta más laureada de la historia e Isidre Esteve motorista del París-Dakar que en 2007 se rompió dos vértebras y pasó a vivir en una silla de ruedas, en 2009 compitió en la misma carrera con un coche adaptado consiguiendo terminarla. Dejaba en la recámara al propio Juan de Zubileta que con trece años cuando partió de Sevilla y fue uno de los primeros seres humanos en dar la vuelta al mundo, fueron tres años de dificultades que desembocaron en una gran gesta.
A cada explicación acompañaba pasajes de los libros de los protagonistas:
Catorce veces ocho mil de Edurne Pasaban
El hombre en busca de sentido de Viktor Frankl
La suerte de mi destino de Isidre Esteve.
Además acompañaba a cada personaje con un vídeo en el que veían a la persona sobre la que les hablaba. La hora pasó de ser algo aburrido, en la que solo había que escucharme a mí, a algo más dinámico donde la participación era más activa. No llego a saber por qué pero Edurne Pasaban fue la persona resiliente que más les atrajo, quizá tenga que ver que a mí me encante la montaña y hablase con más pasión sobre la montañera tolosarra.
Después de hablar un poco de cada modelo les plantee cuáles son las características fundamentales de las personas resilientes:
Son conscientes de sus fortalezas y limitaciones. Se conocen.
Son creativas. La creatividad es un aspecto importante para transformar la dificultad en oportunidad.
Tienen confianza en sus capacidades. Tienen claros los objetivos que pretenden. También dan valor al trabajo en equipo.
Las dificultades se muestran como una oportunidad para aprender.
Tienen el hábito de estar plenamente presentes.
Son personas objetivas, ven la vida desde una perspectiva optimista.
Se rodean de personas que tienen una actitud positiva.
No intentan controlar las situaciones, sino sus emociones.
Son flexibles a los cambios.
Se muestran con firmeza en sus propósitos.
Aplican el humor a los momentos difíciles.
Son conscientes de la importancia del apoyo social, si necesitan ayuda la piden.
Para acercar el tema de la resiliencia al alumnado de primaria elaboré un cuento que he incorporado al final de los cincuenta artículos que he seleccionado en el libro A golpe de timbre, este cuento se lo conté a varios grupos y les llamó la atención.
Gorka “resiliente” Fernández Mínguez